gritan recuerdos,
cuentan de sus glorias,
y no olvidan los mil rostros que vio...
Conoce de sufrimiento,
fue hogar de locos y cuerdos,
Sabe de pasión y sentimiento,
Y casi sin quererlo nos dice qué pasó.
El tiempo lo hizo crecer,
y hoy luce su nueva fachada,
Sabiendo que el que se va, siempre va a volver.
Lloró en soledad, pero esperó...
Quienes lo conocemos, entendemos no es perfecto,
sabemos de canchas rotas y naranjas ovaladas,
pero ese techo que gotea siempre será mi refugio predilecto.
Con la simpatía de una foca, pero la fuerza de un león.
Institución, Entidad, Asociación...pueden decirle como quieran;
pero él, que creció allí, con sus ojos virdriosos,
diciendo "que clusito!" lo define mejor que cualquiera.
Y finalmente, le toma cariño hasta el que nunca lo imaginó...
Imponente, pero humilde, ofece (a todos) un "buen día";
Nunca preguntó nada y aceptó a todos gustoso,
Mas por qué dudaría de quienes lo conocen desde el primer día?.
Ni el único, ni el peor, ni el mejor; Sólo el que sobresale del montón.
Sabe estar en la cima, sabe estar abajo,
Sabe de esfuerzo y sabe de trabajo.
Sufre y ríe como pocos,
club de barrio, club de locos...
---V.B.---